Hasta hace poco, la percepción que se tenía de los trailrunners era la de gente ruda, acostumbrada a sufrir mil penalidades y que el objetivo de llegar a meta sí o sí era algo que se conseguía, aunque fuese a rastras, salvo hecatombe. En los primeros tiempos del trailrunning, sin duda, así era.
Han pasado los años y muchas cosas han cambiado. Entre otras, la proliferación de carreras en el calendario y la popularización del trail y, más concretamente, del ultratrail. Antes, participar en un ultra significaba meses de preparación y plantarse en la línea de salida con la sensación del todo o nada. ¿Por qué? Simplemente porque podría ser que la próxima oportunidad de participar en una prueba similar no se diera hasta unos cuantos meses después. Ahora, afortunadamente, cada fin de semana podemos elegir dónde participar.
Como dice el artículo de Corredor de Montaña, la oferta de carreras hace que esa "segunda oportunidad" cuando las cosas no salen como esperamos esté más cerca. Para los PROs, ¿merece la pena exprimirse a tope si no vas a estar en los primeros puestos cuando dentro de un mes vas a volver a competir en una prueba de altura? Para los POPs, ¿es necesario aguantar horas y horas con dolor, quizás jugándose una lesión más importante, cuando en quince días puedes participar de nuevo en otra carrera?
Preguntas que tendrán todo tipo de respuestas, dependiendo de quién esté al otro lado, pero que derivan en una cuestión genérica que quizás es la más importante. ¿Es bueno o malo para nuestro deporte que ahora resulte más fácil tomar la decisión de abandonar?
Han pasado los años y muchas cosas han cambiado. Entre otras, la proliferación de carreras en el calendario y la popularización del trail y, más concretamente, del ultratrail. Antes, participar en un ultra significaba meses de preparación y plantarse en la línea de salida con la sensación del todo o nada. ¿Por qué? Simplemente porque podría ser que la próxima oportunidad de participar en una prueba similar no se diera hasta unos cuantos meses después. Ahora, afortunadamente, cada fin de semana podemos elegir dónde participar.
Como dice el artículo de Corredor de Montaña, la oferta de carreras hace que esa "segunda oportunidad" cuando las cosas no salen como esperamos esté más cerca. Para los PROs, ¿merece la pena exprimirse a tope si no vas a estar en los primeros puestos cuando dentro de un mes vas a volver a competir en una prueba de altura? Para los POPs, ¿es necesario aguantar horas y horas con dolor, quizás jugándose una lesión más importante, cuando en quince días puedes participar de nuevo en otra carrera?
Preguntas que tendrán todo tipo de respuestas, dependiendo de quién esté al otro lado, pero que derivan en una cuestión genérica que quizás es la más importante. ¿Es bueno o malo para nuestro deporte que ahora resulte más fácil tomar la decisión de abandonar?
Ayer tocaba Traildebate en Territorio Trail. Además del tema del incremento de los abandonos, hablamos por fin de la repercusión que tuvo la carta abierta de François D'Haene en la que compartía su visión actual del trailrunning. También, la actualidad mandaba, del primer caso de dóping en una carrera de montaña oficial, algo que ocupó casi la mitad de nuestro tiempo.
Fueron 80 minutos de Traildebate con temas de Three Days Grace y con Raúl Leorza, Diego Lezcano, Sergio Fernández, David Sánchez y Joey García como trailtertulianos en esta ocasión.
En un programa que, como siempre, podéis descargar también en este enlace de Itunes.
Buenos días
ResponderEliminarEsta mañana venía escuchando este programa a través del Podcast y escuchando a Sergio su opinión sobre los abandonos en las carreras creo que estaba siendo bastante impreciso en su argumentación.
No conozco en profundidad todos los deportes y es posible que en algunos como bien dice no se den estas situaciones, pero en el ciclismo es una cosa que esta a la orden del día. Hay muchos corredores y un caso claro son los sprinter en las grandes vueltas que cuando pasan las primeras semanas y se acaban las posibilidades de ganar etapa se van para su casa a preparar otras carreras.
En las clásicas que es el ejemplo mas asimilable al trail, carreras de un solo días bastante exigentes y con un calendario repleto. Si alguno de los punteros no va fino ese día se baja de la bici y la semana que viene tiene otra carrera. Ademas en el ciclismo entra un componente de equipo que también influye en los abandonos, pero se producen igual por intereses personales, del equipo y picos de forma mas o menos planificados.
Sobre el debate en concreto si los abandonos son buenos o no, es un tema complicado, con muchos matices. Por supuesto hay que separar la élite de los populares pero creo que a nivel profesional ocurre en muchos de los deportes individuales con un calendario mas o menos amplio. En un momento dado beneficiara a unos organizadores frente a otros, pero las semanas de publicidad que atraen a los que pagan son indiscutibles aunque luego solo se saquen fotos en la linea de salida y para casa.
Quizá es otro debate, pero creo que en los populares va muy ligado a que se exige para participar en una carrera de cierta envergadura en preparación y experiencia. La popularización de las carreras puede traer malas pasadas en especial en ciertos entornos de media y alta montaña. Hay que conocer el medio donde te mueves y ser en cierto modo autosuficiente.
Me gusta mucho el programa y creo que es muy interesante. Enhorabuena por el trabajo que realizáis con los medios que contáis.