Todos sabemos cuánto cuesta una carrera. Treinta, cuarenta, cincuenta, cien euros. Es el precio del dorsal. Más barato o más caro, es un dato objetivo. Pero, ¿cuánto vale realmente esa prueba? ¿Qué hace que treinta euros nos parezcan un robo a mano armada y que otras veces paguemos con gusto ochenta? Los servicios recibidos pesan mucho, pero también influirá en nuestra percepción cómo nos ha ido en esa carrera o lo que ha significado para nosotros participar allí.
Para la inmensa mayoría de los que participan en el Marathon des Sables los tres mil euros que cuesta la inscripción están bien invertidos. De hecho, el número de participantes que repiten en años posteriores es más elevado de lo que puede parecer. En mi caso personal, para poder repetir las sensaciones del último kilómetro de Transvulcania no me importaría pagar el doble o el triple de lo que cuesta la inscripción. Del mismos modo que a otras no volvería ni con el dorsal regalado.
Para la inmensa mayoría de los que participan en el Marathon des Sables los tres mil euros que cuesta la inscripción están bien invertidos. De hecho, el número de participantes que repiten en años posteriores es más elevado de lo que puede parecer. En mi caso personal, para poder repetir las sensaciones del último kilómetro de Transvulcania no me importaría pagar el doble o el triple de lo que cuesta la inscripción. Del mismos modo que a otras no volvería ni con el dorsal regalado.
Pero, ¿existe algún baremo para calificar una prueba? ¿Hay alguna tabla donde poder evaluar todos los aspectos de una carrera para poder decir si es cara o barata? Un análisis objetivo, que nos aporte datos sin que medie el factor sentimental.
Actuaalmente, desde la AETRAIL, se está trabajando en una tabla en la que en base a cien puntos se podrá calificar a una carrera. Cien factores que incluyen desde el número de voluntarios, el marcaje, los avituallamientos por kilómetro o los criterios medioambientales hasta la composición detallada de los avituallamientos o las charlas previas. El resultado será una calificación de esa prueba, en la que los cincuenta puntos sea el aprobado y los cien la matrícula de honor.
Entretanto nos tenemos que quedar con el manido euro por kilómetro, que solemos utilizar muchas veces. Sobre él hizo una comparativa Carlos Ultrarun. Y aunque ya tiene dos años y los precios no están actualizados, sí nos pueden servir de referencia. Datos, por lo menos, interesantes. Si bien la mayoría rondan arriba o abajo el euro por kilómetro, hay casos que casi hacen daño a los ojos, como las pruebas argentinas. En palabras del propio Carlos "El precio de las carreras es siempre relativo y valorarlo así no me parece ni justo ni ilustrativo porque lo importante es lo que te dan respecto a lo que se paga, por lo que 4€/km puede ser perfectamente justo y 0,5€/km un robo"
Estos son los datos del precio en euros por kilómetro de 50 pruebas:
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