El año pasado fue la primera vez, esta será la segunda y tiene pinta de que serán muchas más. El primer fin de semana de junio en La Puebla de Alfindén nos cambiamos la camiseta. Por un día dejamos en el armario la zamarra de corredores y nos ponemos la de organizadores. Dejamos de ser los que recorremos los caminos para ser los que marcamos el recorrido. Por un día no cruzaremos la meta y estaremos esperando a los que lleguen a ella. No llegaremos a los avituallamientos, sino que estaremos detrás de las mesas.
A primeros del 2012 nació esta carrera, en junio se hizo mayor y mañana debería ser el día de la consolidación definitiva. Desde luego, por parte de los Correcaminos Alfindén no vamos a escatimar ningún esfuerzo porque salga todo a la perfección, igual que lo llevamos haciendo desde hace meses con las presentaciones del recorrido, las kedadas, la consecución del punto TNF UTMB, la implicación de los más de 100 voluntarios, el apoyo de los Ayuntamientos de los pueblos por los que pasa la TMT (Villamayor, Alfajarín y La Puebla de Alfindén).
Ultimamente mi cuerpo está experimentando distintos tipos de nervios. Los de antes de una carrera eran habituales y conocidos, los de antes de un programa de radio los tengo desde hacer un mes y los de antes de una carrera que organizas ya los conocí el año pasado.
Os puedo asegurar que estos últimos son los peores. Antes de participar en una carrera dependes sólo de ti. En Territorio Trail sólo de trata de llenar 45' de programa de la mejor manera, haciendo que sea interesante y agradable. Pero el día de la TMT... uf, ese día es demasiado. Meteorología, montaje de zona de meta, recorridos, dorsales, corredores. Y a pesar de todo el año pasado disfruté como un niño y la satisfacción cuando terminó el día fue enorme. No sé si mayor o menos que después de terminar una competición, pero distinta.
Ya llevamos unos cuantos años corriendo, y hemos participado ya en bastantes carreras. Hemos saboreado las mieles del éxito, los fracasos, alegrías, sufrimientos en los recorridos y satisfacciones al cruzar las líneas de meta. Pero os aseguro que ninguna de esas sensaciones pueden compararse con las que sentimos el año pasado cada vez que abrazábamos y dábamos la enhorabuena a los finishers de la Trans Montesblancos Trail.
Esperemos que este año también sea así.
Hoy, y hasta el sábado por la noche, nos quitamos la camiseta de trailrunner y nos ponemos la de organizador.
A primeros del 2012 nació esta carrera, en junio se hizo mayor y mañana debería ser el día de la consolidación definitiva. Desde luego, por parte de los Correcaminos Alfindén no vamos a escatimar ningún esfuerzo porque salga todo a la perfección, igual que lo llevamos haciendo desde hace meses con las presentaciones del recorrido, las kedadas, la consecución del punto TNF UTMB, la implicación de los más de 100 voluntarios, el apoyo de los Ayuntamientos de los pueblos por los que pasa la TMT (Villamayor, Alfajarín y La Puebla de Alfindén).
Ultimamente mi cuerpo está experimentando distintos tipos de nervios. Los de antes de una carrera eran habituales y conocidos, los de antes de un programa de radio los tengo desde hacer un mes y los de antes de una carrera que organizas ya los conocí el año pasado.
Os puedo asegurar que estos últimos son los peores. Antes de participar en una carrera dependes sólo de ti. En Territorio Trail sólo de trata de llenar 45' de programa de la mejor manera, haciendo que sea interesante y agradable. Pero el día de la TMT... uf, ese día es demasiado. Meteorología, montaje de zona de meta, recorridos, dorsales, corredores. Y a pesar de todo el año pasado disfruté como un niño y la satisfacción cuando terminó el día fue enorme. No sé si mayor o menos que después de terminar una competición, pero distinta.
Ya llevamos unos cuantos años corriendo, y hemos participado ya en bastantes carreras. Hemos saboreado las mieles del éxito, los fracasos, alegrías, sufrimientos en los recorridos y satisfacciones al cruzar las líneas de meta. Pero os aseguro que ninguna de esas sensaciones pueden compararse con las que sentimos el año pasado cada vez que abrazábamos y dábamos la enhorabuena a los finishers de la Trans Montesblancos Trail.
Esperemos que este año también sea así.
Hoy, y hasta el sábado por la noche, nos quitamos la camiseta de trailrunner y nos ponemos la de organizador.
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