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30 diciembre 2022

Mi 2022

Dice mi Strava que en 2022 he corrido 2.826 kilómetros, que he salido a entrenar 210 días y que he competido, con dorsal, en cinco carreras. Son los mejores números desde 2019 y es el mayor número de dorsales pinchados desde 2018. ¿Me pongo nota? Venga, me pongo nota, digamos un 6.8, por encima del aprobado. Hubiera sido notable mi la huelga de la SCNF no me hubiera dejado en tierra sin poder viajar a la Saintélyon, lo que era el objetivo de la temporada, convirtiendo el 2022 en un año sin ultras, el primero sin tocar el ultratrail desde ¡¡¡2009!!!, pero que no empaña doce meses en los que he conseguido lo más importante, disfrutar del deporte ya sea entrenando o compitiendo.

En febrero descubrí una carrera y una zona nueva en la Apuko Igoera. Una de esas #PequeñasGrandesCarreras de las que hablamos muchas veces en Territorio Trail. Un pequeño pueblo volcado con ella, una organización de 10 y un recorrido bonito y disfrutón. Si la sumamos el barro, la lluvia y todo lo que hace especial una carrera en el País Vasco, tenemos una prueba 100% recomendable con la que terminar un fin de semana largo en Bilbao y, para mi, una buena forma de comenzar la temporada.

Dos meses después tocó rendir visita al señor Maratón, a quien no iba a ver desde el 2017 y que me recibió con los brazos abiertos y un gran mazo en una mano. Después de cuatro maratones (2009, 2010, 2013 y 2017), el de este 2022 lo recordaré como ese al que llegaba con más dudas y que terminó tal y como esperaba antes de comenzarlo, 3h36', pero con el sabor agridulce que te deja el pensar que de podía hacer sido mucho mejor.

Y del asfalto, en junio, vuelta a las montañas y otra carrera nueva por descubrir, la Iberika Trail Piedrafita. Con sus 29 kilómetros y 1200 metros positivos, fue una agradable sorpresa en varios aspectos, el primero, mi rendimiendo. Aunque el tiempo no fuera para tirar cohetes, 4h28', las sensaciones que me deja la carrera fueron muy buenas. Otro aspecto a destacar, el recorrido. Siendo cero técnico, los kilómetros fuera de sendero, que son unos cuantos, le dan un toque de aventura que hace a la prueba diferente. Y el último, la organización, muy serios y correctos, sin alardes pero sin que falte de nada.

Quince días después volvía a una de las pruebas a las que más cariño tengo y que más he disfrutado desde que comencé a correr, la Desértica Olivera Belchite, diez años después de mi última participación. Diez años después, la Desértica Olivera Belchite mantiene toda la esencia que hizo grande esta carrera, aumentada con un recorrido mucha más montañero, con tramos de cresteo y fuera de pista que le dan un punto muy interesante, con la organización de Farleck Sport brillando a gran altura.


Pasado el verano me puse en modo Saintélyon, entrenando desde finales de agosto por y para ella. Cuando preparé el planning de entrenamiento de la Saintélyon, lo dividé en varios ciclos. Una mini pretemporada en Jasa de 15 días acumulando desnivel y kilómetros, una segunda parte de acumulación que en septiembre que debería haber terminado en Ultra Pirineu pero que al fina, las || hicieron que me quedara sin UP y con una semana en blanco, y un tercer bloque de mediados de octubre a mediados de noviembre entrenando en fatiga y acumulando kilómetros anges de empezar a afinar. Después de cinco semanas rondando los 100 kilómetros de entrenamiento, el Trail Mularroya era la carrera elegida para ver si vamos por buen camino o no. Participar en una carrera sin prepararla específicamente, después de una semana normal de entrenamiento y llegando a la salida relativamente cansado. Competir en fatiga y competir bien.

Desde entonces hasta el 3 de diciembre sólo había que afinar entrenamientos y mirar la previsión meteorológica... hasqta que un SMS de RENFE camino a Barcelona me anunciaba la cancelación de los trenes internacionales por huelga en la SNCF, cerrando de forma amarga y bastante desmotivado un 2022 que en conjunto, ha sido casi notable.

 


14 noviembre 2022

Trail Mularroya. Compitiendo en fatiga.

Cuando preparé el planning de entrenamiento de la Saintélyon, lo dividé en varios ciclos. Una mini pretemporada en Jasa de 15 días acumulando desnivel y kilómetros, una segunda parte de acumulación que en septiembre que debería haber terminado en Ultra Pirineu pero que al fina, las || hicieron que me quedara sin UP y con una semana en blanco, y un tercer bloque de mediados de octubre a mediados de noviembre entrenando en fatiga y acumulando kilómetros anges de empezar a afinar. Después de cinco semanas rondando los 100 kilómetros de entrenamiento, el Trail Mularroya era la carrera elegida para ver si vamos por buen camino o no. Participar en una carrera sin prepararla específicamente, después de una semana normal de entrenamiento y llegando a la salida relativamente cansado. Competir en fatiga.

El Trail Mularroya ha cambiado mucho desde la última vez que participé, en 2013. Nueve años después la distancia grande se ha alargado hasta los 31,5 kilómetros y el terreno ha pasado a ser algo menos corredero ganando en espectacularidad. Era una carrera de montaña y ahora es una carrera por montaña, sin nada que envidiar a otras que se organizan en cotas más altas.

A las 9:30, con un día que anticipaba calor, típico de este noviembre que estamos viviendo, comenzaba el Trail Mularroya sin más pretensiones que escuchar al cuerpo y ver si había asimilado bien las semanas de entrenamiento, con una previsión de tiempo de unas cuatro horas. Los tres primeros kilómetros de pista enseguida desembocaban en sendero en constante subida hasta picar el k5 en 30'. Desde allí, por tramos muy correderos y pista, un continuo subebaja que me deja en el k10 en 1h10', momento en que comienza el ascenso al punto más alto de la carrera, que coindide con el kilómetro 15 y dos horas justas.

Un descenso vertiginoso marca el ecuador de carrera, con las piernas respondiendo y sin sensación de cansancio excesivo, que es lo que se trataba. Tras unas cuantas trampas y tramos que mezclan sendero con algún kilómetro de pista forestal, los últimos cinco kilómetros son en suave descenso por caminos agrícolas, que cubro por debajo de 5', y que me dejan en la meta de La Almunia después de 3h45' de carrera.


Lo importante no era el tiempo sino las sensaciones y estas fueron buenas. Menos ya de tres semanas para la Saintélyon, la preparación marcha por buen camino y ahora ya sólo queda afinar.

Mención importante para la organización de Fartleck Sport, a gran altura y haciendo las cosas muy bien, sin alardes pero sin un pero, tanto en el recorrido como en el trato al corredor. Excelente.




19 octubre 2022

Las Skyrunner World Series recuperan el terreno perdido

Zeanuri, con la Gorbeia Suzien albergando las SkyMasters, puso el punto final a las Skyrunner World Series 2022, un circuito que comenzó allá por el mes de mayo en la Skyrace des Matheysins en Francia y que ha pasado, con 13 pruebas disputadas, por 11 países.

En la temporada de la eclosión definitiva de las UTMB World Series y de la consolidación de las Golden Trail Series como circuito de referencia de las distancias "cortas", la tarea de las Skyrunning por hacerse con su hueco en el calendario no era en absoluto fácil. Y si nien es cierto que UTMB World Series, como tal, no es un rival de igual a igual en cuanto a distancias y tipo de prueba y que las Golden en este 2022 ya juegan en otra liga, sin ir más lejos en las finales de Madeira se van a repartir casi 200.000 euros en premios, las SWS han salvado la temporada de forma notable.

¿Cómo lo ha hecho? Desempolvando los orígenes de cuando las World Series las organizaba ISF y apostando por el Skyrunning como un deporte diferenciado, con unas características muy diferentes del trairunning. Carreras de distancia media y altamente técnicas que, por el contrario, también tienen un coste de oportunidad, como es la dificultad para atraer a corredores élite. Con la saturación del calendario se hace difícil convencer a los mejores para estar en una línea y, sin embargo, se ha conseguido. Hemos competir y luchar por la clasificación general a Maite Maiora, Marcela Vasinova, Virginia Pérez, Lindsay Webster (la vencedora final), Iris Pessey, Sandra Sevillano, Oihana Azkorbebeitia o Martina Cumerlato entre las mujeres y a Christian Mathys, Nico Molina (ganador), Damien Humbert o Robert Loic entre los hombres. 

También hay que destacar la importancia que se le ha dado al circuito por parte de, por ejemplo, la Selección Vasca que ha acudido en bloque a casi todas las pruebas o por FEDME, para la que la participación en las carreras de las SWS eran uno de los criterios de selección para los Mundiales de Skyrunning.

Seguramente todo lo anterior no sería posible sin un factor determinante, el económico. Las Skyrunner World Series han repartido 35.000 euros en premios, a los que debemos sumar los 15.000 que se repartieron en la Gorbeia Suzien, fruto de la apuesta por el circuito de un patrocinador potente como es Merrell. Hoy en día el ofrecer premios económicos importantes resulta fundamental, y así se está entendiendo en carreras y circuitos.

Decía en mayo que para que las Skyrunner World Series 2022 tuvieran posibilidades de éxito como circuito debían "ofrecer un "producto" de calidad, que las organizaciones estén a la altura y que la visión del circuito se perciba como un todo, no como una suma de carreras que cada una haga su guerra, unido, no hay que olvidarlo, a premios en metálico que lo hagan atractivo."

Ahora, con la temporada finalizada, creo que se ha conseguido. La organización y la comunicación ha sido notable, hemos podido ver a un número importante de élites participando y el seguimiento ha sido sobresaliente. En 2022 se ha podido recuperar el terreno perdido del año de la pandemia y el posterior y, a partir de aquí, el circuito sólo puede seguir creciendo. Ojalá sea así en 2023. 





12 septiembre 2022

A los pies de los caballos

La Selección Española de FEDME ha regresado de los Campeonatos del Mundo de Skyrunning de Ossola con cuatro medalles (dos platas y dos bronces) y un segundo puesto en el ránking final de países, por detrás de Italia y por delante de Japón. Los números no mienten y estas cuatro medallas están lejos de los excelentes resultados cosechados en las dos citas Skyrunning que se celebraron en 2021, mundiales y europeos de 2020, aplazados en su día por la pandemia.

Sin embargo, aceptando sin ninguna reserva la premisa de que las medallas que han venido a España son casi un tercio de la última cita, no podemos perder la perspectiva de que las platas de Gemma Arenas y Patricia Pineda y los bronces de Sandra Sevillano y Alejandro Mayor han conseguido llevar a España al segundo cajón del podio por selecciones y mantener a nuestra selección, un año más, en la élite del skyrunning mundial en unos campeonatos que han batido un récord de participación con 35 países representados.

¿Son unos resultados buenos? Podrían ser mejores. ¿Son unos resultados malos? En absoluto, y más todavía cuando nos olvidamos de un aspecto my importante: la presión a la que ha estado sometida una selección cuya composición ha recibido innumerables críticas desde el momento en que se hizo pública su composición.


La crítica es buena, debe hacerse, pero siempre a su debido tiempo y, antes de los campeonatos era momento de remar juntos en la misma dirección y no añadir más presión a unos corredores y corredoras a los que, a la ya de por sí presión de defender una camiseta en unos mundiales, se unía la de aquellos que ponían en duda que tuvieran el derecho a enfundarse la camiseta roja en Ossola, demostrando una salvaje falta de respeto hacia ellos y dejándolos a los pies de los caballos.

En tiempos de redes sociales, de tuiteo y click fácil, la bola de nieve se hizo cada día más grande y se cebó especialmente con alguna corredora. Ninguno de los integrantes de la selección impuso su presencia en Ossola, siendo elegidos para representar a nuestro país en base a unos criterios que se hicieron públicos en febrero. 

¿Podríamos haber llevado una selección mejor que consiguiera más medallas? Es posible, como también es posible que si preguntamos a diez personas entendidas en la materia cada una elaborara una selección diferente. Porque todos tenemos un seleccionador dentro.

No sé si la selección que disputó los mundiales de Ossola era la mejor que podíamos haber llevado, pero sí sé que se le ha faltado al respeto, que no se ha sido justo con ella y que, con toda la presión a la que se ha visto sometida, ha respondido de la mejor manera que se puede hacer, con profesinalidad, dándolo todo y volviendo a casa como la segunda mejor selección del mundo.




29 agosto 2022

Kilian, el COVID, el sub20 de Blanchard, Marianne Hogan, Jim Walmsley, los dinosaurios, el túnel del metaverso y todo lo que nos dejó el UTMB 2022

Dinosaurios en pleno recorrido del UTMB, el túnel del metaverso, Kilian Jornet rompiendo una barrera que parecía imposible y Mathieu Blanchard hacer lo propio, Jim Walmsley respetandp este deporte que amamos y a los que luchan sólo por cruzar la meta, Katie Schide demostrando que las estadounidenses le tienen pillada la medida a la carrera y Marianne Hogan sufriendo lo indecible para tocar la gloria de Chamonix. 

El Ultra Trail Mont Blanc 2022 comenzó con un fallecimiento que vistió de luto el evento y con una noticia que condicionó todo. Durante la PTL un participante brasileño perdió la vida. El accidente mortal, de noche y en un tramo muy complicado, es el segundo consecutivo tras el del año pasado en la TDS, también de noche. Ambos se han producido en las dos pruebas más complicadas del evento UTMB, momento quizás para la que la Organización se plantee pedir algo más que unas running stones para tomar la salida en estas dos carreras.

Todo estaba listo para que el viernes comenzara la 19ª edición y las previas publicadas con los duelos que se esperaban cuando, el miércoles por la tarde, Kilian Jornet anunciaba en sus redes sociales que había sido, que era en esos momentos, positivo por COVID19 y que su participación en el UTMB estaba, al menos en duda. Un terremoto de gran magnitud, veinticuatro horas de rumores y de suposiciones que el propio Kilia, también desde sus redes, dejó atrás tras confirmar el viernes por la mañana que finalmente sería de la partida.

Y vaya si fue de la partida. Si alguien albergaba dudas sobre las capacidades de Kilian, este 2022 se las ha disipado. Ganar UTMB por cuarta vez es una salvajada, pero no hay que olvidar que hace más de 10 años de su último triunfo (2011) y que lo ha conseguido rompiendo una barrera, la de las 20 horas, que hasta hace apenas dos años se antojaba imposible y sólo, cuando Pau Capell lo puso encima de la mesa se empezó a hablar de él. Si alguien podía hacerlo era Kilian. Las 19h49', unidas a sus mermadas capacidades físicas, otorgan una valor todavía mayor a una victoria que se une a Zegama y a Hardrock 100 en el mismo año. Incontestable.

Pero no podemos olvidar que otro corredor también bajo de esas mágicas 20 horas. El francocanadiense Mathieu Blanchard, tras aguantar el tipo a Jornet hasta Vallorcine, e incluso desde allí nunca perderle la cara, firmó unas espectaculares 19h54', un tiempo que le convierte en miembro del selecto club de corredores que ha logrado bajar de 20 horas en UTMB... compuesto por él y Kilian. Destacar también que este corredor hizo un TOP5 en el Marathon des Sables del 2021.

¿Y Jim? ¿Qué haríamos sin Jim Walmsley? Un corredor que año tras año, UTMB tras UTMB, golpe tras golpe, se gana el respeto de toda la comunidad trail mundial. Que lideró la carrera durante la primera mitad, que volvió a salir a por todas, que volvió a explosionar y que, una vez más, tiró de pundonor y orgullo para conseguir llegar a Chamonix y firmar otro TOP5. Un año más sin la gloria de la victoria, pero otro año con el respeto de todos, con el respeto que se merece quien lo da todo, quien no se da por vencido y quien, pudiendo optar por la decisión más fácil que hubiera sido montarse en el coche e irse a casa, elige continuar sufriendo y hacer grande este deporte que tanto queremos. Por él y por todos merece algún día ganar el UTMB.

UTMB

Y si lo Walmsley es para enmarcar, no menos el carrerón de Marianne Hogan. De líder destacada con sensaciones para enmarcar a ser adelantada quitándole las pegatinas por la posterior ganadora Katie Schide y completar lesionada y casi andando los últimos veinte kilómetros. Verle llegar a Vallorcine sufriendo transmitía una angustia tremenda, pero logró tirar de épica y conservar una segunda plaza que sabe a gloria, sólo por detrás de una Katie Schide que demostró una vez más que las estadounidenses le tienen pillada la medida a Los Alpes mientras que los hombres se estrellan año tras año. Digno de estudio.

El UTMB de 2022 ha sido también el del túnel del metaverso y el de los dinosaurios animando. El túnel de luces de colores en el recorrido hubiera hecho las delicias de Steelman para utilizarlo en las salidas de sus retos. Desde luego, una de las fotografías que nos deja esta edición, como la de los dinosaurios animando a los corredores, los mismos que acompañaron a Ruth Croft en su entrada en meta en Western States 100 y muy probablemente con la misma Ruth dentro de uno de ellos.

La 19ª edición del Ultra Trail Mont Blanc ya es historia. Ya falta manos para el 2023, para un veinte aniversario que, vista la progresión de la prueba a nivel mediático, promete emociones fuertes.







18 julio 2022

Kilian, Courtney, los extraterrestres, la vieja escuela y todo lo que nos dejó la Hardrock 100

Desde el Area 51, en Nuevo Mexico, hasta Silverton, en Colorado, hay una distancia de 750 kilómetros. Sin embargo, el pasado fin de semana, los extraterrestres estaban en las montañas de San Juan, materializados en las figuras de Kilian Jornet y Courtney Dauwalter que, cada uno a su manera, conquistaron la Hardrock 100. El español por quinta vez y la estadounidense, al fin, por vez primera. Y aunque el desarrollo de la carrera fue diferente en chicos que en chicas el resultado y, sobre todo el poderío de ambos, fue similar. 

Titulaba la crónica de Territorio Trail, en un fácil juego de palabras con su nuevo proyecto, que Kilian Jornet no es NNormal. Y, lo que nos transmitió desde Colorado no hace más que corroborarlo. No tanto por la victoria, que es algo que podíamos intuir en un 2022 en el que le percibidmos extraordinariamente motivado, sino por el modo en el que lo hizo. Cien millas no son un paseo y menos en Hardrock, por lo que ganar nunca es fácil. Pero comparar el rosto de Kilian con el de François D'Haene era hacerlo con una persona que estaba disfrutanto cada milla y otra que permanentemente iba con el gancho.

2022 no está regalando un Kilian Jornet rejuvenecido, que cuenta sus participaciones por victorias y, desde mi percepción muy motivado. Da la impresión, me da la impresión a mi, que su salida de Salomon ha sido una liberación después de mucho años y que el proyecto NNormal, más que una nueva marca, le supone un impulso vital que hace mucho que no vivía.   

Y si lo de Kilian es digno de estudio, ¿qué decir de Courtney Dauwalter? Dominando la prueba desde las mismas calles de Silverton, sin dar la mínima opción a sus rivales y finalizando sexta de la general, volviendo a demostrar que es la mejor del mundo en las distancias largas y, de paso, quitándose la espina y besando la roca por primera vez.

Nnormal - Rick Danielson

Fuera de lo meramente deportivo, la Hardrock nos ha llevado diez años atrás en el tiempo. A pesar de la difusión que tiene a nivel mundial es una carrera pequeña, muy pequeña y familiar, con una organización excelente y una comunidad involucrada más allá del cien por cien. Pero, a nivel de medios, muy lejos de una WS100, un UTMB, una Zegama o unas GTWS en retransmisón. Eso, que nos impidió seguir en directo ese duelo entre Kilian François, nos hizo bucear durante 24 horas en perfiles desconocidos de Twitter y de Instagram, actualizar constantemente una primitiva web de tiempos de paso y, en definitiva, recordar lo que hacíamos para seguir una carrera diez años atrás.

Y, para terminar, destacar el trabajo en comunicación de NNormal. Lanzar un proyecto de cero no es fácil aunque, evidentemente, que detrás esté Kilian Jornet lo simplifica bastante. Sin embargo, el trabajo duro hay que hacerlo igualmente. Estamos viendo consolidar una imagen de marca potente cuando ni siquiera podemos comprar su productos todavía y, para ponerlo más en relieve, sin bombardearnos con logos o notas constantes a los medios. De hecho, buscar NNormal en la ropa de Kilian y Dakota este fin de semana era incluso complicado. Pero todos sabíamos que allí estaba. Una imagen de marca impecable y un cuidado seguimiento de carrera unido, que por supuesto es la guinda del pastel, al primer puesto de Kilian y tercero de Dakota, otorga matrícula de honor al trabajo de quien está detrás de la comunicación de NNormal.




04 julio 2022

Desértica Olivera Belchite, que diez años no es nada

Hubo en tiempo, cuando el trailrunning todavía no había explotado como fenómeno de masas, en el que el primer fin de semana de julio era cita obligada para los que buscábamos un tipo de carreras diferentes. Ese fin de semana era el de la Desértica Extrema, una prueba que rápidamente se hizo un hueco en el calendario y que fue evolucionando hasta convertirse en referencia y que este fin de semana, tras cambios en la organización y recorridos, llegaba a su 16ª edición impulsada por Fartleck Sport. Una carrera en la que había participado por última vez en 2012, en la versión de 50 kilómetros, y a la que después de diez años me apetecía volver.

Con 26 kilómetros y 600 metros positivos la Desértica es la prueba ideal para iniciarse en carreras de montaña, o de monte sería mejor denominarla, para aquellos que quieren probar lo que es salir del asfalto. También, para los que estamos acostumbrados a salir sólo en montaña, la oportunidad de hacer algo diferente y divertido.

Saliendo a las 7:30 de la mañana del Pueblo Viejo de Belchite la denominación extrema pierde algo de fuelle. A cambio, un buen madrugón de domingo por la mañana para ir a correr. Salida rapida por las calles del puebli viejo hasta salir a las primeras pistas, kilómetros para coger ritmo y sensaciones picando el primer 5k en 29', ya en mitad de la primera de las dos subidas potentes del día, que se corona con unas vistas impresionantes del Campo de Belchite para enlezar con un descenso campo a través primero y por senderos después que nos llevará hasta Almonanic de la Cuba y el espectacular paso por la Presa Romana. Poco más adelante llego al kilómetro 10 en 1h10' de carrera, tranquilo y disfrutanto de un recorrido que me trae muy buenos recuerdos.


Dejado atrás Almonacid comienza y segundo tercio de recorrido marcado por los constantes toboganes, ascensos y descensos contínuos por terrenos de senda y fuera de pista que hacen difícil mantener un ritmo constante pero que a cambio permiten recuperar del esfuerzo con bastante facilidad. La última dificultad la dejamos atrás en el kilómetro 18 (2h10'), tras la cual un descenso lleva a la Ermita de Nuestra Señora del Pueyo y entonces, ahora sí, el típico recorrido de la Desértica de siempre, kilómetros de pista y camino que me llevan de nuevo a la meta del Pueblo Viejo tras 3h02'.

Diez años después, la Desértica Olivera Belchite mantiene toda la esencia que hizo grande esta carrera, aumentada con un recorrido mucha más montañero, con tramos de cresteo y fuera de pista que le dan un punto muy interesante, con la organización de Farleck Sport brillando a gran altura.

Una prueba muy recomendable, apta para todos los públicos y que, quizás, podría pensar en distancias superiores en ediciones futuras. Tendría su público.


Thks:
Salomon España
Suunto España
Esportiva Aksa
Strava
Organización Desértica Olivera Extreme




20 junio 2022

Iberika Trail Piedrafita, un puntito salvaje

La Iberika Trail de Piedrafita, con sus 29 kilómetros y 1200 metros positivos, ha sido una agradable sorpresa en varios aspectos. El primero, mi rendimiendo. Aunque el tiempo no haya sido para tirar cohetes, 4h28', las sensaciones que me deja la carrera han sido muy buenas. Es la tercera carrera de un 2022 que está siendo bastante decente a nivel de entrenamientos y dorsales. Otro aspecto a destacar, el recorrido. Siendo cero técnico, los kilómetros fuera de sendero, que son unos cuantos, le dan un toque de aventura que hace a la prueba diferente. Y el último, la organización. No había corrido nada de Iberika Trail y me han parecido muy serios y correctos, sin alardes pero sin que falte de nada.

Esta Iberika Trail de Piedrafita no era la primera opción, ya que el plan era correr en Ayerbe la primera edición del Trail Villa de Ayerbe de 57 kilómetros, finalmente suspendido por la baja inscripción. Así que me fui para Piedrafita de Jaca, a una prueba que celebraba su segunda edición y que es la "rara avis" de un circuito de ocho pruebas que, salvo esta, se celebran todas en la Comunidad de Madrid.

Poca gente, tan pocos como 35 estábamos inscritos en la distancia de 28k, de los que tomamos la salida 32. Lo que viene a ser una carrera entre amigos y en la que tienes muchas posibilidades de ir solo todo el recorrido, como efectivamente así fue.


A las 9:15, con una hora de adelanto por el calor que se supone que íbamos a pasar y que finalmente no fue para tanto y sí un fuerte viento que nos acompañó todo el recorrido, se daba la salida en Piedrafita Lodge. Primeros cuatro kilómetros corredores para encontrar sensaciones antes de comenzar un ascenso, potente primero y sostenido después, que nos dejaría bordeando el ibón de Piedrafita con un viento que iba en aumento pero que nos daba de culo :).

Con la Peña Telera de espectadora de lujo poníamos rumbo al collado de la Punta d'os Casters, punto más alto del recorrido, 2035 metros y ecuador de la carrera. Kilómetro 14 picado en 2h24'. Ni muy rápido ni muy lento, bien de fuerzas aunque castigado por el terreno, siempre fuera de sendero y con la hierba muy alta, siendo difícil mantener un ritmo constante.

La segunda parte del recorrido era mucho más favorable, en constante bajada, primero por el mismo tipo de terreno salvaje y más adelante por una pista corredora que desembocaba en el Ibón de Piedrafita, con 22 kilómetros en 3h20'. Ocho kilómetros fáciles en los que pequé de exceso de confianza, vaciándome demasiado para empezar a sufrir en el último tercio de carrera que, a pesar de ser muy favorable, se me hizo muy largo.

Los kilómetros entre el bosque pasan despacio y la última subida, de apenas cien metros de desnivel en medio kilómetro, pica en las piernas, pero ya estoy de nuevo en el Piedrafita Lodge, cruzando la meta de esta Ibérika Trail Piedrafita en 4h28', más o menos el tiempo previsto antes de empezar pero, sobre todo, después de haber disfrutado mucho cada kilómetro.

En resumen, una carrera muy recomendable que ya anuncia importantes novedades para la próxima edición con distancias superiores y con una organización profesional y a la altura.

Thks:
Salomon España
Suunto España
Esportiva Aksa
Leki Trail
RunningZGZ
Strava
Organización Iberika Trail Piedrafita


10 junio 2022

Luces y sombras de los cuatro grandes circuitos en la primera mitad del año

A punto de llegar al ecuador del 2022, cuando la noche de San Juan ya asoma en el horizonte, es posible hacer balance de los grandes circuitos mundiales en esta primera mitad del año. Uno que continúa con su expansión alrededor del mundo con excelentes resultados, otro que año tras año crece en calidad y seguimiento, un tercero que está resurgiendo de sus cenizas cual ave fénix y un cuarto que, una vez más, está dejando de lado otra oportunidad para pasar sin pena ni gloria.

¿Sabéis cuál es cuál?

Las UTMB World Series continúan, con velocidad de crucero, liderando el panorama mundial y, en mi opinión, haciéndolo todo bien. Una maquinaria perfectamente engrasada en la que se unen una excelente comunicación, unos eventos tremendamente atractivos, distancias ya para todos los públicos en cada uno de ellos y el anuncio, en momentos muy bien elegidos, de las nuevas fechas que se incorporarán en 2023. Cuidando sus carreras estrellas y ampliando horizontes en los mercados emergentes del trail. Ya sabemos que Tailandia tendrá dos pruebas el próximo año y que también podremos correr en Oriente Medio, Africa y Sudamérica. Estados Unidos también anuncia nuevas pruebas y habrá más en Europa. Todos los caminos llevan a Chamonix, la catedral del imperio Poletti que se extiende a lo largo y ancho del globo.

Las Golden Trail World Series siguen, como ya hicieran en 2021, con su imparable ascenso, cimentado en dos pilares: la altísima calidad de los nombres que podemos ver en cualquiera de sus líneas de salida y la apuesta por la imagen. Espectáculo al más puro estilo showtime. La reciente Zegama Aizkorri es un claro ejemplo y un modelo que se va a replicar en el resto de pruebas. Saben que, si además de tener un producto de alta calidad lo sabes vender, el éxito está asegurado. Serie de televisión incluida, los élites de las GTWS están pasando tener estatus de estrellas del rock.


Las Skyrunner World Series nacieron junto con nuestro deporte en la época de las mallas de colores chillones, crecieron, se expandieron, casi murieron y renacieron hasta llegar a ese mágico 2019 en el que Limone sul Garda nos regaló una final que todavía recordamos. Después llegó una pandemia que les pilló a pie cambiado, una año de travesía en el desierto y un 2022 en el que, y ya van unas cuantas veces, vuelven a resurgir de sus cenizas para ofrecer un circuito diferente y muy atractivo. Pruebas más montañeras que corredoras, recorridos espectaculares y un buen puñado de élites que apuestan por un circuito con muchísimo trabajo entre bambalinas. Personalmente, me alegro enormemente de que vuelvan a ser lo que fueron.

Hace poco menos de un año escribía aquí que el Spartan Trail World Championship había perdido un año, con los consiguientes palos y reproches por escribir, simplemente, lo que pensaba. Han pasado nueve meses y la sensación es la misma. Se nos vendió el Spartan World Championship como el circuito definitivo y sigue sin dar ese paso al frente que necesita para que se le considere como tal. Su primera prueba, la Transgrancanaria, parecía que iba a hacerlo pero, una vez pasada, todo se desvaneció. Un gran circuito no puede dejar su imagen a las carreras. Eso es algo que se trabajó muy bien en Skyrunning, que dieron el salto definitivo cuando pasaron a comunicarse como un todo, no como un grupo de carreras. Spartan lleva camino en 2022 de repetir sus errores del pasado año y ojalá que no sea así, a tiempo están.

Un circuito que continúa con su expansión alrededor del mundo con excelentes resultados, otro que año tras año crece en calidad y seguimiento, un tercero que está resurgiendo de sus cenizas cual ave fénix y un cuarto que, una vez más, está dejando de lado otra oportunidad para pasar sin pena ni gloria.



30 mayo 2022

Los extraterrestres Kilian y Nienke, el sueño hecho realidad de Sara, la llegada de los keniatas y todo lo que nos dejó la Zegama Aizkorri 2022

La Zegama Aizkorri 2022 ya es historia. Los focos se apagan en la plaza de Zegama, el griterío desaparece de Sancti Spiritu y ya empezamos a pensar en la edición del próximo año todavía con la sangre caliente tras hacer disfrutado de una de las mejores ediciones de la historia. La Zegama de los récords y no de unos récord cualquiera, la de las marcas estratosféricas. Y es que, después de dos años, llegábamos a la cita vasca con muchas ganas y también con muchos focos de atención.

Era la primera Zegama Aizkorri de Kilian Jornet fuera de Salomon y la presentación en sociedad de NNormal. Se hacía raro verlo vestido de negro pero, por dentro era el mismo Kilian de siempre, que mutó en modo caníbal para dominar desde los primeros kilómetros su Zegama, sólo seguido hasta el Aizkorri por Davide Magnini. A partir de allí no hubo historia, o sí, porque además de ganar su décima Zegama Kilian buscaba más, el récord, un tiempo que recortó en casi diez minutos el de Stian Angermund en 2017. 3h36'40" que pasan a la historia, que tardarán muchísimos años en mejorarse y que mantienen a Kilian Jornet, unos cuantos años ya después de su debut, en lo más alto del escalafón. Con sólo cuatro carreras en su calendario esta temporada, lo veremos en Sierre Zinal, Hard Rock y UTMB, da la impresión de que preparará con mimo cada dorsal con el único objetivo de inscribir su nombre en lo más alto.

Y si lo de Kilian es de otro planeta, la actuación de Nienke Brinkman nos deja sin calificativos para la holandesa que, desde el primer kilómetro se exprimió al máximo en una demostración de poderío para mejorar en 18 minutos el tiempo récord hasta entonces en poder de Maite Maiora. 4h16'43" en su primera participación en una Zegama que recordará para siempre y que la recordará a ella, no sólo por el triunfo, también por el cómo, con un ascenso final al Aizkorri a un ritmo descomunal.

Nienke, Kilian... y Sara. Sara Alonso respondió a lo que esperábamos de ella, no le pudo la presión y se marcó un tercer puesto, llevada en volandas por su público, a pocos segundos de Maud Mathys en su primera participación en una carrera disfrutada de principio a fin. Ya sabíamos que Sara había llegado al trail para quedarse, pero lo de ayer fue la demostración de que está llamada a marcar una época y, a buen seguro, a ganar en Zegama más pronto que tarde.

Toño Miranda    

No puedo dejarme a los keniatas y a su excelente, al fin, rendimiento. Yo era de los que no les daba más allá de un TOP20 como mucho, pero Robert Pkemboi y Matthew Kiptanui, quinto y noveno, me han convencido de que es posible verles delante. Con el esfuerzo de sus entrenadores de modificarles los hábitos, especialmente los alimenticios y con lo importante que es para ellos poder venir dos semanas antes a una carrera y entrenar sobre el terreno. Esta Zegama ha sido un primer paso pero, si siguen manteniendo estas pautas, podremos verles en cabeza de las carreras más adelante.

La Zegama Aizkorri 2022 ha sido la de los récords, la del retorno tras dos años, la de ver otra vez al público llenando el recorrido, la de una meteorología envidiable, la de los populares con dorsal desde febrero del 2020, la del inicio de las Golden Trail World Series 2022 y la carrera que podéis revivir en las cinco horas de la retransmisión de Territorio Trail, en audio o con imagen en Twitch.

Zegama es Zegama porque siempre nos regala historias maravillosas, porque hace años la gente que subía al monte llevaba impresa la lista de dorsales para animar personalmente a cada corredor, porque esa semana es especial en toda Guipúzcoa. Porque Zegama es Zegama se le conoce en todo el mundo y por eso hay corredores superclase, como Courtney Dauwalter que, a sabiendas de que no es su distancia y no pueden luchar por la victoria, no quieren perderse aunque sea un vez en la vida vivir esta fiesta.

Zegama es Zegama porque, a pesar de ser ya un "monstruo" global sigue manteniendo su esencia de carrera pequeña con un pueblo volcado en ella y en todos los que vienen a disfrutarla, ya sea corriendo o animando. 

Zegama es Zegama y lo será muchos años más.






24 mayo 2022

La Ruta de las Golondrinas

A finales del siglo XIX y principios del XX, cuando la vida no era ni por asomo tan fácil como ahora, la forma de ganarse la vida era muy diferente y, en las zonas pirenáicas, más. El trabajo en la vertiente española no abundaba y, cuando llegaba el otoño, cientos de mujeres de la zona occidental del Pirineo, ansotanas, roncalesas y salacencas cruzaban las montañas para trabajar durante el invierno en Francia, especialmente en la industria alpargatera de Mauleón.

Sus vestimentas negras y las fechas de ida, en otoño, y regreso, en primavera, hizo que se les comenzara a llamar "golondrinas". Viajes que duraban del orden de tres o cuatro días y que, con el paso del tiempo, se convirtieron en todo un acontecimiento social.

Más de cien años después, la travesía de montaña La Ruta de las Golondrinas, recuerda aquella migración anual en una ruta circular que atraviesa alguno de los parajes más bellos del Pirineo Occidental, circunvalando Larra y recorriendo, a caballo entre España y Francia, los valles de Belagua, Linza, Lescún y La Pierre de Saint Martin.

Actualmente, aunque son bastantes las variantes que se pueden realizar, la más clásica es la que, saliendo y llegando a Belagua, completa la ruta en unos 65 kilómetros con 3500 metros de desnivel positivo en cuatro etapas, pernoctando en los refugios de Linza, Laberouat y Jaendel. Este recorrido es orientativo, puesto que el punto de inicio y final puede ser cualquiera de los cuatro refugios.

La Ruta de las Golondrinas, como La Senda de Camille el año pasado, el HomeToSummitToHome del 2020 o La Ruta de la Insurrección de los Valles del anterior, es la elegida para este verano dentro de las rutas que intento completar dentro de la zona de los Valles Occidentales.

Será en el mes de agosto, muy probablemente en dos días, 17 y 18 de agosto, comenzando y terminando en Linza y durmiendo en Jaendel. 





18 mayo 2022

¿Dónde está el sitio de las Skyrunner World Series en 2022?

Hace dos semanas comenzaban en la Skyrace des Matheysins las Skyrunner World Series 2022, un circuito que esta temporada contará con 13 pruebas repartidas en 11 países y, sobre todo, con un objetivo. Ese objetivo no es otro que el de recuperar su sitio en el calendario mundial, aquel que tenía en 2019, en la época prepandemia y que, con mucho esfuerzo (y también inversión económica, por qué no decirlo), le llevo a ser el mejor circuito de aquella última temporada normal.

Pero llegó la pandemia mundial que, si bien afectó a todos los organizadores, sus efectos no fueron iguales para todos. Hay quien se adaptó, hay quien salió reforzada y hay quien, como las Skyrunner World Series, salieron seriamente dañadas dando al traste con un trabajo espectacular, sobre todo entre bastidores, forjado en las últimas temporadas. Con el 2020 para olvidar y un 2021 en el que poco a poco vimos brotes verdes en el circuito, qué mejor ejemplo que la Gorbeia-Suzien, lo que vemos para 2022 pinta muy bien.

En mi opinión, el objetivo para este 2022 debe ser triple:  atraer el interés del público, el de los medios y, sobre todo, el de los corredores puesto que si se consigue esto último la atención en el circuito está asegurada. ¿Es fácil? En absoluto y, además, ahora es más difícil que hace tres años.

Las Skyrunner World Series nacieron, crecieron, se expandieron, casi murieron y renacieron hasta llegar a ese mágico 2019 en el que Limone sul Garda nos regaló una final que todavía recordamos. Justo en aquella temporada se disputaba la segunda edición de unas Golden Trail World Series que parecía que podían dispersar la atención. Más todavía cuando buques insignia hasta entonces de las Skyrunning, como era el caso de Zegama, desertaron para ser parte del circuito impulsado por Salomon. Por aquel entonces, si bien es cierto que las Golden Trail World Series tuvieron un tirón importante, en ningún momento llegaron a acercarse al interés de las Skyrunner World Series 2019.

David Carlier    

Pero en tres años el mundo del trail (llámalo como quieras) ha cambiado mucho y las Golden Trail World Series han ocupado ese hueco que antes era casi propiedas de las Sky. Ahora, y no hay más que ver la lista de élites de Zegama el próximo fin de semana, los mejores de la media distancia se citan en el circuito de Salomon, que además ha puesto en marcha una maquinaria espectacular de comunicación y seguimiento de las pruebas.

¿Puede Skyrunner World Series competir con las Golden o, al menos, convivir en un plano de igualdad? Sin duda, sí, pero para ello debe apostar, como lo está haciendo por la diferenciación. Algo que ya se está haciendo desde ISF, que siembre recalca que el Skyrunning es un deporte propio, diferente del trailrunning o de las carreras por montaña.

Es necesario que el producto sea de calidad, que las organizaciones estén a la altura y que la visión del circuito se perciba como un todo, no como una suma de carreras que cada una haga su guerra, unido, no hay que olvidarlo, a premios en metálico que lo hagan atractivo.

Por el momento, lo que anticipa el calendario y lo que vimos en Matheysins apunta a que las Skyrunner World Series recuperarán en 2022 mucho del terreno perdido. Espero que así sea, será muy bueno para nuestro deporte (llámalo como quieras).



09 mayo 2022

¿Puede Sara Alonso ganar en Zegama?

La irrupción de Sara Alonso en el panorama del trail, no ya solamente nacional, sino también internacional, ha sido la más potente que, al menos yo, recuerdo. Más que abrir, derrribó la puerta del trail con un segundo puesto en la Canfranc-Canfranc de 16k del 2020, en lo que era su primera participación en una prueba de montaña. Un 2020 que continuó con el triunfo en la Aramotz Mendi Lasterketa y en Ibiza en la prueba del Campeonato de España de la RFEA por autonómicas. 

El huracán Sara no había hecho más que empezar. Con una calidad que le viene de serie, de sus inicios en el atletismo, el desparpajo de su jueventud y las ganas de darlo todo en cada carrera en la que compite, el 2021 fue el año en el que pudimos comprobar que no era flor de un día y que había llegado al mundo del trailrunning para quedarse.

Ya dentro de Salomon España, donde llegó vía Biel Rafols, en sus participaciones en la temporada pasada se sucedieron los éxitos, quizás sin ningún triunfo pero sí con excelentes resultados en las Golden Trail Series (2 podios, dos TOP10 y un 11º puesto final) y otros resultados de prestigio como el séptimo en Transgrancanaria. Imposible no mencionar la agónica llegada a la meta de El Hierro en la final de las Golden confirmando que Sara Alonso siempre da todo en las carreras.

Y si el 2021 fue el año de su explosión, los meses que llevamos de este 2022 son los de su consolidación al más alto nivel. Por las carreras que ha ganado y por la forma en que lo ha hecho. Dominando con mano de hierro en el maratón de Transgrancanaria, en la Calamorro Skyrace y el pasado fin de semana en la Berga-Rasos-Berga, donde además llevó a su selección al título nacional. Las tres victorias, además, con récord.

Esta temporada de nuevo las Golden Trail World Series forman el calendario principal de Sara Alonso, unas Golden que comienzan el 29 de mayo en la Zegama-Aizkorri, que vuelve después de dos años sin celebrarse con una participación incluso mejor que en ediciones anteriores. Es el próximo objetivo, y casi puedo decir que principal en este primera mitad del año, para Sara Alonso, que volvió a casa hace unas semanas tras los meses en Gran Canaria.

Si el recorrido de la Transgrancanaria fue su patio de entrenamiento entonces, el de la Zegama-Aizkorri lo es ahora. Un recorrido que ya conoce a la perfección y una distancia, la maratón, que ya ha empezado a interiorizar. Corriendo en casa, con los suyos, y en el estado de forma en el que se encuentra ahora mismo, ¿puede ganar? Para mi, sí.

Zegama es Zegama. La frase resume en tres palabras todo lo que es esta carrera, y para dominarla no sólo vale con correr mucho. Hay que manejar distancia y tiempos, se tiene que conocer el terreno, es necesario saber a lo que te enfrentas y tienes que llegar con un extra de motivación además de la que ya el propio público te da en el recorrido. Sara Alonso reúne ahora mismo todas estas cualidades, a la que además se le añade el hambre de quien quiere ganar en casa, en "su carrera", y un estado de forma que casi podríamos calificar de "estado de gracia".

Tendrá junto a ella a las mejores del mundo, desde Maude Mathys a Nienke Brinkman pasando por Courtney Dauwalter, pero su desparpajo la hacen candidata a lo máximo. Sí, Sara Alonso puede ganar en Zegama.




05 abril 2022

Marathon des Sables, un dinosaurio que rejuvenece cada año

La de este 2022 ha sido la edición número 36 del Marathon des Sables. No creo que, cuando Patrick Bauer puso en marca la carrera, pensara que iba a llegar hasta ni tampoco creo que se imaginara que lo iba a hacer en este estado salud. Porque el Marathon des Sables, en los últimos años, está viviendo una segunda juventud cimentada en la evolución, en hacer bien las cosas y en adaptarse a los nuevos tiempos.

Porque, cuando nació la carrera allá por 1984, venderla era muy sencillo. Al igual que el Dakar en el mundo del motor, no había nada en el atletismo (hablar de trail o ultratrail en aquellla época era una quimera) que se le pareciera. Una prueba en la que tenías que atravesar el Sahara durante 250 kilómetros, en la que la organización sólo te daba agua y tenías que llevar todo lo necesario contigo, se convirtió en un imán para aventureros y todo aquel que quisiera buscar los límites de su resistencia. La época dorada de los raids, los ochenta y noventa, fue también la del Marathon des Sables, que año tras año llenaba unas plazas que en España y Francia se agotaban el mismo día de la apertura de inscripciones y que, en países como Gran Bretaña, la lista de espera se alargaba dos años. Sin duda, era "la carrera".

Sin embargo, el Marathon des Sables sufrió un estancamiento a partir del 2010. Entonces ya no era la única carrera de este tipo, había otras opciones y, por qué no decirlo, tampoco atraía la atención de los grandes corredores. Algo que cambió con la inclusión de la prueba en el Ultra Trail World Tour que permitió ver a élites entre los que se enfrentaban al desierto. 

La presencia en el UTWT volvió a situar al Marathon des Sables en la primera página de los medios, poniendo el foco de nuevo en el desierto. Aunque el matrimonio con el circuito no terminó del todo bien, ese nuevo empujón nos permitió ver enfrentarse al desierto a Magdalena Boulet, Fernanda Maciel o Ragna Debats y, en esta última edición, a Anna Comet, Manu Vilaseca o Gerard Morales. 

El MDS volvía a ser una carrera atractiva pero esta atracción no se debe sólo a que aparezca en medios o en que participen corredores top. Detrás hay un gran trabajo de la organización que se ha adaptado como pocas a las nuevas tecnologías y que permite que se pueda seguir la prueba prácticamente en tiempo real, con actualizaciones en redes sociales, fotografías y videos resumen al poco de finalizar cada etapa. Si a ello le sumamos la excelente difusión de las historias personales y de superación de los participantes, encontramos 

Todo, sin perder ni un ápice del espírutu de aventura que le caracterizaba en sus inicios.  36 años dan para mucho y, en el caso del Marathon des Sables, para seguir siendo la carrera de aventura por excelencia.








04 abril 2022

El implacable señor Maratón

Han tenido que pasar cinco maratones para conocer a toda la aristocracia del maratón, al señor del mazo y al famoso muro. Después de cuatro maratones (2009, 2010, 2013 y 2017), el de este 2022 lo recordaré como ese al que llegaba con más dudas y que terminó tal y como esperaba antes de comenzarlo, 3h36', pero con el sabor agridulce que te deja el pensar que de podía hacer sido mucho mejor.

Un mes específico de preparación ha dado para recuperar unos ritmos por debajo de 5'/k que desde San Sebastián 2017 no había tocado. El cuerpo respondió bien pero me faltaba interiorizarlos en rodajes largos. El máximo que hice fue de 20 kilómetros y terminé muy justo. Con estos antecedentes el domingo a las 8:30 me puse en la línea de salida del Maratón de Zaragoza, en una mañana muy fría y ventosa, aunque con menos cierzo del que anticipaban las previsiones y una duda en la cabeza: salir a ese ritmo que me permitiera un holgado sub 3h30' o probar algo más rápido a ver qué pasaba y, a las malas, tener un colchón de tiempo.

En esas estaba todavía pensando en los dos primeros kilómetros, de tanteo, cuando, casi sin darme cuenta, las piernas se empiezan a animar y comienzo a ver ritmos de 4'25"/4'30" corriendo muy cómodo y pasando el 10k en 45'. Tiempos que no había conseguido hacer en los entranamientos me salían casi sin querer así que... ¿y por qué no seguir así mientras se pueda?

Dicho y hecho el ritmo de crucero, previsto en 5' el viernes, pasa a ser de 4h30', picando incluso algún kilómetro por debajo de 4'15", y llegando a la media en 1h31'. Es el momento en el que pienso que es demasiado bonito para ver ser verdad sin encontrar explicación al rendimiento hasta entonces. Sigo aguantando bien y continúo de la misma forma.

Así hasta el 30, que lo paso en 2h15', justo a la altura de casa de mis padres y es allí donde, ironías de la vida, todo se viene abajo de repente y las fuerzas desaparecen de repente. Además, coincide con el tramo más complicado del maratón, los kilómetros en los que la carrera pica hacia arriba.


El ritmo de carrera empieza a acercarse a cinco minutos, luego los supera e incluso algún kilómetro me sale por encima de seis. La subida por Cuéllar hacia el Parque Grande me parece más difícil que el mayor de los kiómetros verticales y ni siquiera los últimos cuatro kilómetros, ya favorables de nuevo y, conforme llegas a meta, el público me hacen recuperar. 

Cruzo meta en 3h36', el peor maratón de lejos de los cinco en que he participado. Un crono que, si bien está en línea con lo que podía esperar la semana pasada, deja un sabor agridulce por cómo fueron los primeros treinta kilómetros de carrera.


Thks:
Salomon España
Suunto España
Esportiva Aksa 
Maratón de Zaragoza
RunningZGZ 




31 marzo 2022

El gran día del Maratón de Zaragoza

Hubo que esperar mucho tiempo hasta que Zaragoza tuvo su maratón. Años de iniciativas, rumores, bulos, inocentadas los 28 de diciembre... pero nada se concretaba. Tuvo que llegar la elección de Zaragoza como sede de la Expo 2008 para que, por fin, la línea azul que marca los 42,195 Kms se pintara en las calles. 

La primera edición de las dos que se celebraron al amparo de la Expo fue en el 2007. Aunque con visos de continuidad lo cierto es que, yo el primero, no se le auguraba un futuro muy longevo. A ver, Zaragoza no es precisamente la alegría de la huerta en lo que se refiere a animación en las carreras. La gente no suele echarse a la calle a animar salvo en puntos muy concretos. Vamos, que no es un evento que mueva masas a excepción de los que corremos y sus correspondientes amigos y familiares. 

A lo anterior le añadimos las dificultades para conseguir un recorrido estable en estos años. Las obras que nos han asediado por una causa u otra, sobre todo la construcción del trazado del tranvía han hecho complicado conseguir un recorrido decente cada año y, lo que es más importante, que no varíe de una edición a otra.

Las fechas tampoco ayudaban. Primero se buscaron las semanas finales de noviembre, pero la cercanía con otros maratones más consolidados y con esa climatología tan especial que tenemos por aquí se decidió moverlo a la actual, finales de septiembre. A pesar de que por lo general no gusta mucho preparar un maratón con los calores del verano, y que un día de perros también te puede salir un 29 de septiembre, creo que la decisión fue muy acertada.



Pasaron los años y las ediciones y el maratón se consolidaba en la ciudad, aunque sin dar su salto definitivo hacia las grandes citas nacionales. Sobrepuesto a una riada y a una pandemia, la edición del pasado año, celebrada en octubre, significó el primer escalón de ese salto de calidad. La entrada en la organización, junto a RunningZGZ, de Last Lap, se tradujo en resultados desde el primer momento y, podemos afirmar sin niguna duda, que la de 2021 fue la mejor edición de la historia... hasta el próximo domingo.

El 3 de abril es el gran día del maratón de Zaragoza y, muy probablemente, el día soñado por todos aquellos que se esforzaron en sacar adelante aquella primera edición de 2007. El domingo Zaragoza será el escenario del Campeonato de España. No será, además, un campeonato cualquier, puesto que además otorgará plazas para el europeo de este verano.

Un nuevo y mejor recorrido para los 42k, un apasionante 10k, una participación de altura, importantes premios, récord de inscritos y la percepción de que Zaragoza ya está en el top de maratones españoles. Todos los ingredientes para que este domingo sea el gran día del Maratón de Zaragoza, el día esperado desde hace quince años.




23 marzo 2022

Pelotas de Camper en los pies de Kilian

La noticia, primero, fue la salida de Kilian Jornet de Salomon. Un matrimonio, de esos que parecía para toda la vida, al que se ponía fin a finales del 2021. Ciertamente tampoco había sido la pareja perfecta, pero su disolución nos pilló a contrapié a casi todos.

Asimilada la noticia, llegaba la segunda pregunta. ¿Y ahora? Enigmáticamente Kilian Jornet hablaba de nuevos proyectos sin concretar nada. ¿Iba a lanzar una marca propia? ¿Abandonaba el trail y alpinismo de alto nivel para dedicarse enteramente a su fundación? Todo eran suposiciones sin ningún fundamento claro más allá de ver como dejaba atrás todos los patrocinios que tenía hasta 2021: Suunto, Volvic...

El anuncio de su participación en el Ultra Trail Mont Blanc confirmaba que seguiría compitiendo por lo que, ahora sí, la pregunta se reducía a saber "con quién". La respuesta, por fin, se hacía pública el miércoles 23 de marzo, sorprendiendo a propios y extraños, aunque ya circulaba el rumor desde primeros de mes. NNormal, cofundada por Kilian Jornet y Camper, es su nuevo proyecto. Una marcsa que lanzará al mercado en otoño una edición limitada centrada en calzado, ropa y accesorios para carrera de montaña. Kilian Jornet será el embajador y cabeza visible de un equipo cuyos componentes se presentarán próximamente.


¿Hacían falta tantas alforjas para este viaje? Pues, para presentarlo de esta forma probablemente no, pero en este 2022 en el que somos rehenes y a la vez partícipes de todo lo que signifique crear expectación en redes sociales, la verdad es que desde el lunes 21 que Kilian hacía saltar la liebre prácticamente no se ha hablado de otra cosa, incluyendo un embargo de noticia, una figura a la que cada vez nos estamos acostumbrando más en el trail.

Presentar una línea de ropa y calzado mediante un comunicado de prensa y unas pocas fotografías es como ir a un restaurante con tres estrellas Michelin y sólo ver la comida sin poder catarla. Sin embargo, como todo lo que ha rodeado siempre a Kilian Jornet, la puesta de largo de NNormal ha sido un éxito a nivel de repercusión.

Pero, ¿qué es NNormal? Una línea de ropa que se basa, en palabras de Kilian Jornet "en tener un impacto mínimo en el medio ambiente, trabajando con materiales y diseños distintos. Nos enfrentamos a un proceso largo y difícil, pero eso es lo que nos motiva, a mí y al equipo, a la hora de iniciar este proyecto”.

Claramente, estas palabras se alinean con los objetivos de la Fundación de Kilian Jornet y es, sin duda, uno de los pilares en los que se basa el nuevo proyecto.

¿Funcionará? Lanzar una marca de cero es un reto importante. Hacerlo en un sector tan especializado como el del trail y la montaña, mayúsculo. Pero no tengo ninguna duda de que sí, funcionará, y sobre todo por una razón. Porque es la nueva marca de Kilian Jornet.





11 marzo 2022

Lo que nos ha dejado Barkley Marathons 2022

Un sheriff que trae de vuelta a Frozen Head a un Karel Sabbe desorientado, al que encuentra hablando con un cubo de la basura y que, antes de volver, se hace una fotografía con Lazarus Lake. Un Guillaume Calmettes que se ve obligado a abandonar durante el segundo "loop" porque el fuerte viento hizo salir volando una de las páginas de sus libros y no podía atestiguar su paso. El "fun run" de Jasmin Paris en su primera participación, que anticipa un futuro inmenso para ella en Tennessee. El segundo "loop" de un español, Albert Herrero, al que siempre le quedará una espina clavada en forma de brújula para volver alguna vez.

La Barkley Marathons nos deja una vez más el sabor de lo imposible, John Kelly continuará siendo el último finisher de la prueba, es una edición que se cerró con cinco "fun runs", anécdotas divertidas y todo el sabor de siempre de una carrera que seguimos al minuto y contamos en Territorio Trail Media.

Como todos los años, me hago la misma pregunta. ¿Cuál es el atractivo de una carrera que apenas reúne cuarenta participantes en un remoto parque nacional de los Estados Unidos más profundos? ¿Qué hace que seguidores de todo el mundo estén enganchados durante dos días a las noticias que alguien tuitea desde allí? Seguramente no hay una explicación lógica, pero tampoco la hay muchas veces para nuestro deporte. Barkley emana una atractiva energía de fracaso, personificada como nadie en aquella imagen de Gary Robbins abatido en el suelo. Y ese fracaso, esa casi certeza de que nadie va a poder finalizar el recorrido es lo que tiene un imán especial.

Y aunque parecía que en esta edición eso iba a cambiar, con Karel Sabber y Greig Hamilton comenzando el cuarto bucle, Barkley volvió a ganar.

Alexis Berg    

Y sí, mal que les pese a algunos, Barkley sigue siendo auténtica y no ha perdido ni un ápice de lo que le ha hecho famosa a lo largo de los años. ¿De verdad alguien puede pensar que, en 2022, Lazarus y el resto de la pandilla puede seguir comportándose como en 1992?. 

Lazarus Lake sorprendió a participantes, medios y seguidores rompiendo con su costumbre de organizar la carrera en torno al 1 de abril, adelantándola tres semanas sobre la fecha habitual, debido a las filtraciones de parte del recorrido el año pasado por parte de un «youtuber». Molesto el año pasado por la presencia de un YouTuber miembro del equipo de apoyo de uno de los corredores, que había hecho algunos videos en el recorrido de Barkley, Laz esta vez decidió bloquear toda la información. Entre los participantes de esta edición, corredores de muy alto nivel: John Kelly, Courtney Dauwalter, Karel Sabbe, Jasmin Paris, Guillaume Calmettes, Harvey Lewis y el español Albert Herrero, que consiguió su plaza en 2020 pero no pudo participar por las restricciones de viaje.

Tras un primer loop con modificaciones en el recorrido y una meteo favorable todo apuntaba a que este año sería diferente. Sin embargo, todo cambió en el segundo loop y durante la noche, cuando apareció la lluvia, la niebla y los fuertes vientos, convirtiendo el recorrido en tramos infernales en los que la orientación era casi imposible.

La Barkley Marathons 2022 nos ha regalado una competición como hacía años que no recordábamos. Karel Sabbe y Greig Hamilton se encontraron en el cuarto loop, tras completar ambos el «fun run», ya de por si un gran éxito. Sabbe lo hizo tras 32h21′ de competición y Hamilton con 34h20′ en sus piernas. El primero descansó apenas 9 minutos antes de continuar y el segundo lo hizo poco más de media hora. La cruz de la moneda era para John Kelly, que completaba el fun run en 35h26′ pero decídía no continuar. A pesar de todo, un resultado excepcional para el que es, todavía hoy, el último finisher de Barkley Marathons. El cuarto corredor que comenzó el tercer bucle, Thomas Dunkerberg, también se lleva a casa el fun run 39h27′ de tomar la salida.

Cuando todo apuntaba a que Karel Sabbe podía conseguir ser finisher, a mediodía hora española llegaba la noticia de su abandono, por problemas de orientación, tanto para seguir el camino como para él mismo. Después de buscar ayuda en un cubo de basura que pensó que era una persona, así como de algunos automovilistas que pasaban, Karel fue llevado de regreso al campamento por el Sheriff del Condado de Morgan. A partir de ese momento sólo quedaba en carrera el neozelandés Greig Hamilton.

Un Greig Hamilton, que ya llegó al cuarto loop en 2019, al que el reloj se le echaba encima. Pasaban las horas y el minutero se acercaba a ese límite de las 13h54 (española peninsular) que marcaba las 48 horas desde el inicio. No pudo ser, y el fatídico tweet de Keith llegó puntual a su hora. El neozelandés no pudo completar el loop 4 en tiempo.



03 marzo 2022

La delgada línea de lo justo y lo injusto

Primero fue la ISF, luego IRONMAN y después UTMB Group y las Skyrunner World Series. Los cuatro grandes transatlánticos de "nuestro deporte" seguían las recomendaciones del Comité Olímpico Internacional y prohibían, con efecto inmediato, la participación de corredores y corredoras rusos y bielorrusos en sus competiciones, aunque con algún matiz ya que IRONMAN sólo hace referencia a corredores profesionales mientras que UTMB lo extiende a todos aquellos con nacionalidad rusa y bielorrusa. Igualmente también se cancelaban las pruebas previstas en territorio de los dos países y UTMB eliminaba su etiqueta "UTMB® World Series Qualifier" a las pruebas organizadas allí. Una medida que, centrándonos en UTMB, afecta a 101 corredores (99 rusos y 2 bielorrusos inscritos en las diferentes distancias). 

Una decisión que tiene números tangibles en cuando a la participación rusa y bielorrusa pero que también tiene una segunda parte, ahora mismo imposible de cuantificar, la de los ucranianos a los que les será imposible participar en una prueba fuera de su país por las consecuencias de la guerra.

¿Es justa esta medida? Impedir la participación de deportistas en base a su nacionalidad como castigo a los estragos de sus dirigentes no lo es. Como tampoco es justo, muchísimo menos, que la población ucraniana esté muriendo por esos mismos dirigentes. ¿Qué justicia es más importante?


No podemos perder la perspectiva de que, en 2022, el deporte en todos sus aspectos es un altavoz importantísimo. Lo más importante de las cosas menos importantes decimos muchas veces, y utilizarlo como medida de presión es algo habitual.

De mantenerse la situación actual no veremos a corredores y corredoras rusos y bielorrusos ni en Chamonix, ni en la Val d'Aran ni en cualquier prueba deportiva organizada por las entidades citadas. Pero, muy probablemente, tampoco podremos ver a ucranianos ni ucranianas. 

No debemos olvidar que, mientras que rusos y bielorrusos no podrán participar por una medida de entidades que se lo prohíbe, los ucranianos no pueden hacerlo porque han tenido que huir de sus casas, obligados a alistarse en el ejército o haberse convertido en refugiados.

¿Qué es más injusto?     




 

22 febrero 2022

Mundial de Tailandia, el cuento de nunca acabar

Cuando ya parecía que nada podía sorprendernos en lo referente a las noticias de los Campeonatos del Mundo de Tailandia, que debían celebrarse el próximo noviembre en la zona de Chiang Mai, la WMRA hacía pública esta la semana la noticia de un nuevo cambio de fechas, en esta ocasión un adelanto de dos semanas respecto a las últimas anunciadas, por lo que estos primeros mundiales unificados de WMRA, ITRA e IAU pasarán a disputarse entre el 3 y el 6 de noviembre. ¿La causa? La coincidencia en fechas con la cumbre Asia Pacífico, organizada en Bangkok.

¿Y esto no se podía saber antes? Probablemente sí. En 2022, cuando cualquier organizador de una carrera pequeña se preocupa de mirar el calendario para buscar coincidencias en fechas, la principal prioridad de quien está al frente de ¡¡¡unos campeonatos del mundo!!! debería ser perder una hora de su tiempo en consultar la agenda de eventos que se organizan en el país. Más todavía cuando una de las condiciones que hizo públicas la ITRA a los futuros anfitriones, aparte de un jugoso canon de 150.000 dólares, es el acreditar la disponibilidad de 1500 camas en hoteles de categoría mínima tres estrellas.

Este episodio no es sino un capítulo más de unos mundiales heridos de muerte, que ni despiertan interés en Tailandia ni son bienvenidos por los actores locales del trail, algo que no es opinión, es información.

Los Campeonatos del Mundo de Trail de Tailandia debían ser la puesta de largo del desembarco del atletismo, representado por WMRA, ITRA e IAU en el mundo del trailrunning. Algo que se nos vendía como la gran panacea para en crecimiento de nuestro deporte con un gran objetivo en el horizonte, el olimpismo. La realidad sin embargo, tozuda y cruel, demuestra el nulo interés por el trailrunning más allá del gran trozo de pastel que pretenden quedarse las federaciones, en el caso español la RFEA, sin siquiera conocer a fondo sus reglas ni mucho menos el espíritu de la montaña.


Los Campeonatos del Mundo coexistieron en el calendario con la Thailand by UTMB. Mientras que el mundial mudaba de fechas sin un destino fijo, la prueba de la franquicia UTMB se mantuvo y solamente se retrasó unas semanas para conseguir coincidir con la apertura de fronteras y tener participación extranjera. El resultado, por todos conocidos, fue el éxito de una prueba y de un formato, el "BY UTMB" que añadirá otra carrera en Tailandia en 2023.

Mientras tanto, los Campeonatos del Mundo dan tumbos en un calendario internacional cada día más completo. Las nuevas fechas y las restricciones de las respectivas federaciones con sus seleccionados obligarán a corredores y corredoras a elegir entre circuitos privados y el mundial. También, porque no decirlo, a decidirse por participar en carreras con importantes premios en metálico. La poca profesionalización del trail actualmente hace que esta decisión sea lógica y normal.

¿Habrá Campeonatos del Mundo de Trail? Mi apuesta es que no en 2022, probablemente no en Tailandia y, si se llegaran a organizar, con un perfil tan bajo que no merecerían el nombre de Campeonatos del Mundo.