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27 junio 2018

Carreras olvidadas. Las pruebas desérticas que marcaron época en Aragón. El Isostar Desert Marathon.


Resulta inevitable en algún momento echar la vista atrás y recordar carreras que, por unos u otros motivos, ya no se organizan. Más en los calurosos meses de verano, cuando sumando las altas temperaturas y unos recorridos sin ninguna sombra en kilómetros a la redonda lograban importar las pruebas desérticas a la puerta de casa por un fin de semana. La Desértica Extrema y, con tan sólo dos ediciones celebradas, el Isostar Desert Marathon, fueron dos de ellas.

2011 Y 2012 fueron los años en los que pudimos disfrutar de la Isostar Desert Marathon, organizada por la entonces todopoderosa No Limits y que, desgraciadamente, no tuvo continuidad a pesar de lo interesante del proyecto y la excelente acogida que tuvo.

Un recorrido secreto y la autosuficiencia alimentaria eran los ingredientes fundamentales de una ultra que en su primera edición registró más de 300 inscritos y que ofrecía dos distancias. Una ultra de 110 kilómetros y 27 horas para completarla y otra más asequible de alrededor de 50 kilómetros. Todo ello en el mes de julio y en la zona de los Monegros. De hecho el centro de operaciones y la zona de meta y salida era en las instalaciones del famoso Monegros Desert Festival, localizado en mitad de la nada. Tanto que para acceder a él había que transitar en coche varios kilómetros por una pista forestal polvorienta.

Se conseguía de esta forma transmitir sensación de soledad y de alejamiento de la civilización, algo que se conseguía en la práctica totalidad de los recorridos. Si mal no recuerdo, solamente algún paso subterráneo por la AP2 recordaba que no estábamos en mitad del Sahara. Y a eso le añadíamos que el recorrido no se desvelaba hasta el momento de la recogida del dorsal el día anterior, ya en el campamento, la sensación de aventura era total.



Lamentablemente la aventura de la Isostar Desert Marathon y no se celebró una tercera edición. ¿Los motivos? Fundamentalmente económicos pero también, y sólo quizás, hace 7 años el mundo de trail español no estaba todavía preparado para una prueba de estas características. 

En cualquier caso dejó un hueco en el calendario que no se ha conseguido llenar. Quizás ha llegado el momento de recuperar el formato.




20 junio 2018

Marcha de los Tres Ibones. Material. Alimentación. Track.



Puede que la característica más importante de la Marcha de los Tres Ibones es que se trata de una prueba en casi completa autosuficiencia. En los dos avituallamientos había agua, chocolate y gominolas, por lo que llevar la alimentación encima resulta fundamental y marca, sobre todo, la capacidad de la mochila. Al tratarte también de montaña, siempre hay que llevar algo de abrigo por lo que pueda pasar.

CAMISETA. Komland Endurance Q1. La camiseta de Territorio Trail. Aparte de lo espectacular que es visualmente, y es que se sale de lo que estamos acostumbrados a vr, es una camiseta superligera que transpira y evacua el sudor rápidamente. Lo que se pretende de una camiseta, y más en verano, no notar ni que la llevas.

PANTALÓN. Salomon Trail Runner Short. Prenda muy recomendable, ligero, con malla interior pero sin llegar a comprimir y con bolsillos traseros potentes para llevar más de un gel. 

CALCETINES. Hoko Kure. Comodidad. Es lo único que les pido a unos calcetines. Si además aguntan bien la humedad y secan rápido el paso por ríos, que fueron unos cuantos, y demás, la elección es perfecta.

ZAPATILLAS. Salomon Sense Ride 2.Primera carrera en la que utilizaba este modelo, en la que salí con apenas 20 kilómetros con eleste par. Muy agradable sorpresa en una zapatilla que se comportó muy bien en los tramos húmedos, con nieve y barro, que al final fue casi la mitad del recorrido. Zapatillas a recomendar y tener en cuenta.

MOCHILA. Salomon Advanced Skin 12. Pocas veces la había utilizado y ninguna en carrera, y es que cada vez el material es menor y no hace necesaria una mochila tan grande. En cualquier caso, en la Marcha de los Tres Ibones era necesaria. Además de los bastones llevaba 8 geles, una Bonatti, guantes y slgún accesorio más. A pesar de su tamaño se ajusta perfectamente al cuerpo y no molesta en absoluto, incluso permitiendo sacar y meter los bastones sin quitársela.

BASTONES. Altus Haya. Plegables. Para aluguien como yo, poco acostumbrado a usarlos, suficientes. Al final, casi me son de más utilidad en las bajadas que en los ascensos.



ALIMENTACIÓN EN CARRERA (FUERA DE AVITUALLAMIENTOS)
3 Powergel
3 Powergel Smoothie
4 pastillas sales Powerbar Isomax.

Track en Strava:







18 junio 2018

Marcha de los Tres Ibones. Race Report. La niebla, otra vez.


La del pasado fin de semana era la tercera vez que me inscribía en la Marcha de los Tres Ibones y, de nuevo, realizarla completa tendrá que esperar. La causa, un año más, la niebla que cubría toda la parte francesa del recorrido y que obligó a la Organización a recortar el tramo del tercer ibón, desde Arlet hasta Estanés, dejando la prueba en unos 35 kilómetros que una equivocación en la parte francesa llevó hasta los mas de 38 en mi caso :). Y es que ni el viernes por la tarde en Hecho ni el sábado por la mañana en Oza antes de la salida la meteo nos hacía suponer que no podríamos completar los Tres Ibones y nos tendríamos que quedar en dos, Acherito y Arlet, aunque este último la niebla no nos permitió ni siquiera verlo.

La Marcha de los Tres Ibones es una carrera muy especial. Tanto, que se trata de una "no carrera". No hay arco de salida, no hay línea de meta y no existen clasificaciones. A cambio tiene todo el encanto de una prueba familiar y, sobre todo, un recorrido que puede pasar por uno de los más bellos de todo el Pirineo y que este año, tras las lluvias y la nieve del invierno y la primavera, estaba verdaderamente espectacular.


A las siete y media de la mañana unos 120 participantes comenzábamos la marcha. De ellos, alrededor de 50 íbamos a por los tres. Tras unos dos kilómetros por el tramo de carretera que sale del camping de Oza, enseguida comienza el ascenso al Ibón de Acherito. Un día fantástico para correr y las buenas sensaciones hacen que, a pesar del desnivel, el primer ascenso pase volando. 10 kilómetros justos hasta el ibón, setecientos metros de ascenso y 1h35' para completarlos. No está mal. Desde aquí, tras un descenso fácil y divertido de unos dos kilómetros comienza el camino hacia el Puerto del Palo, que este año introduce una variante por cota más baja. Zona de ascenso tendido pero cómodo donde el sol empieza a apretar, siguiendo el "Camino de la Libertad" que llegaba hasta Francia y atravesando algunos neveros, uno de ellos con susto incluído y caída hasta la cintura sin más.

Es en este momento cuando la niebla se echa encima, al punto de que ya el control situado en esta zona deja de estar visible y me voy recto en vez de girar a la izquierda. Unos pitidos desde lo alto me avisan y recupero la orientación buena. En control se encuentra justo en la frontera y el paso a Francia, más que a otro país, parece a otra dimensión, con la niebla haciéndose más espesa conforme avanzamos.


Justo en el kilómetro 20, con 3h30' de carrera, un gran nevero y la escasa visibilidad nos hace dudar, a mi y un corredor que venía detrás sobre el camino a seguir. Pasamos varios minutos buscando la senda correcta sin decidirnos hasta que al final os decantamos por la izquierda, ya que se adivinaba una traza... Error. El grupo de dos se convierte en trío con otro participante y tras quince minutos nos convecemos de que por allí no es. Toca volver hacia atrás, e intentar buscar el camino correcto, lo que conseguimos tras casi 45' y el consiguiente cabreo.

El toque es importante, porque hasta ahora había funcionado bastante bien, pero no tardamos en reponernos y afrontamos el ascenso al Ibón de Arlet y el refugio del mismo nombre. Cuanto más ascendemos más espesa la niebla y sólo a apenas tres metros conseguimos ver a los voluntarios del control. Tras 25 kilómetros y 4h45' de carrera nos comunican que la Marcha se ha suspendido-cortado en este punto por la niebla y que desde Arlet, que por cierto ni siquiera se veía, se ha marcado un recorrido alternativo hasta Aguas Tuertas. Uno de los voluntarios nos acompaña al inicio del ese recorrido, que coincide con la frontera. Cruzamos a España y, como por arte de magia, la niebla desaparece y el sol vuelve a brillar.

Tres kilómetros de descenso nos llevan hasta Aguas Tuertas, que luce como hacía tiempo. 28 kilómetros y desde aquí, tras vadear varias veces, último puesto de control y ocho kilómetros de pista pestosa e interminable hasta llegar de nuevo el punto de salida, Oza, picando en 6h55'.

Cuarta carrera del 2018, finalizada contento y con buenas sensaciones. Como curiosidad, segunda del año recortada por la meteo, como en Borredà.

Recorrido espectacular, organización brillante y la excusa perfecta para repetir en 2019 y completar por fin los tres ibones. Prueba recomendable, una de esas #PEQUEÑASGRANDESCARRERAS






14 junio 2018

Marcha de los Tres Ibones. Pre Race. Empezando a pensar en Guara.


La de este año será la edición número quince de la Marcha de los Tres Ibones, que no quince años de carrera, puesto que en determinados períodos no se ha organizado como por ejemplo en 2015.

Con salida y llegada en Oza, cincuenta y dos kilómetros de distancia y dos mil metros positivos, la carrera transcurre a caballo entre el Parque Natural de los Valles Occidentales, en España, y el Parque Nacional de los Pirineos, en Francia. Correr por dos parques y dos países no es la única peculiaridad de una marcha que apenas está marcada salvo por las señales de los senderos de gran recorrido. Tan solo en algún tramo difícil en la parte española y en ningún momento en la francesa. 

Una carrera que sólo oferta 150 dorsales que casi seguro no se completarán. La saturación del calendario y el hecho de que no sea una prueba muy conocida a pesar de sus doce ediciones anteriores hace que se corra casi en familia.

Sobre el recorrido, los cincuenta kilómetros pueden dividirse en tres partes bastante claras. Los primeros 10, de subida hasta el Ibón de Acherito, donde se salvan ochocientos metros positivos. Algún repecho fuerte que se alterna con prados de montaña. Un ligero descenso para poner rumbo al Puerto del Palo y a Arlet, ya en suelo francés y rondando cota 2000. Kilómetros más agrestes y unos cuantos por la cresta que hace las veces de divisoria hasta un descenso potente que nos deja ante la subida más complicada del día, unos seiscientos metros en apenas tres kilómetros que llevan al Ibón de Estanes. Superado esto, quince kilómetros de descenso pasando por la increíble zona de Aguas Tuertas y llegando de nuevo a Oza.

Al tratarse de una prueba no competitiva no existen clasificaciones al uso, sí diplomas oro, playa y bronce en base al tiempo empleado. El oro, si terminas por debajo de ocho horas, la frontera que más o menos calculo como tiempo objetivo para el sábado.

Será el primer salto de los 50 kilómetros en un 2018 que está siendo raro con muchas menos horas, y por lo tanto kilómetros, de entrenamiento que en temporadas anteriores. Tres carreras disputadas hasta ahora, todas en mes y medio y con el Ultra Trail Guara Somontano como gran cita del año, que parecía lejano pero que empieza a vislumbrarse en el horizonte.

¿Cómo irá la cosa? Veremos. El que no esté marcada me da un no se qué, y a pesar de que llevaré el track en el Spartan no las tengo todas conmigo. Físicamente no me encuentro ni muy mal ni muy bien. Motivado, ni mucho ni poco y la meteo para el fin de semana la dan buena con calor.

El sábado, a partir de las 7:30. Oza, Acherito, Arlet, Estanés, Oza. España y Francia. Valles Occidentales y Parque de los Pirineos.





12 junio 2018

Marcha de los Tres ibones. Previa. Joyas por descubrir



El próximo sábado 16 se celebrará una nueva edición de la Marcha de los 3 Ibones. Acherito, Arlet y Estanés son los tres ibones que dan nombre a la prueba, que tiene como salida y llegada el idílico paraje de la Selva de Oza en el Valle de Hecho y que une, en una misma carrera, tres de las excursiones más características de la zona. Organizada por la Asociación Turística Valle de Hecho, oferta 150 dorsales para el conjunto de las tres distancias.

Poco más de 50 Kms y 2100 metros positivos en la distancia más larga, la de los Tres Ibones, de una prueba que se puede dejar también en uno (Acherito, 15 Kms, +800) o dos (Acherito y Arlet, 30 Kms, +1000) y cuya principal característica es que se trata de una marcha no competitiva más enfocada a realizarla andando que corriendo y con un número máximo de dorsales limitado a doscientos.

La Marcha de los Tres Ibones tiene varias características que la convierten en una prueba, por lo menos, atípica. No está marcada salvo las marcas de los senderos GR y HRP por los que transita, lo que no llega a ser un handicap pero sí supone que se debe estar algo más atento de lo normal. También es una carrera que se realiza en casi autosuficiencia, puesto que tan solo existen dos puntos de avituallamiento y es sólo líquido. Y la tercera peculiaridad es que el recorrido transita durante toda su parte central por Francia.


Organizada por la Asociación Turística del Valle de Hecho, es una de las actividades que se realizan a lo largo del año para dar a conocer esta parte del Pirineo. 

Los Valles Occidentales, en el Pirineo Aragonés, es probablemente una de las zonas más desconocidas de la cordillera. Con las localidades de Ansó y Hecho como núcleos más destacados la zona, y en especial el Parque Natural de los Valles Occidentales ofrece múltiples propuestas para los amantes de la montaña en un entorno, aunque parezca increíble en estos tiempos, todavía sin masificar.

Con una altitud que oscila entre los 900 metros en la cota más baja de los Valles y los 2.670 metros de la cima del Bisaurín, que aparece como gran dominador, el parque ocupa poco más de 27000 hectáreas en las que se encuentran los valles de cinco ríos: Vera, Osía, Lubierre, Subordán y Estarrún. Desde senderismo a rutas de alta montaña, las propuestas de la zona son inmensas, todo ello entre inmensos bosques propios de su clima de influencia atlántica. Un paraíso para aquellos a los que nos apasiona la montaña pero también para los que nos gusta correr por ella.

La Marcha de los Tres Ibones comienza el sábado 16 a las 7:30.




05 junio 2018

10 años de Transvulcania


Desde 2009 a 2018. De Marta Prat y Salva Calvo a Ida Nilsson y Pere Aurell. De victorias de referencias en nuestro deporte como Kilian Jornet o Luis Alberto Hernando a sorpresas maravillosas como la de Tim Freriks.

Diez años en los que Transvulcania ha situado a la Isla de La Palma en el mapa del Skyrunning mundial, una década en la que la prueba se ha convertido en una de las más importantes del calendario internacional y por la que ha pasado, la gran mayoría de corredores top mundiales. Anna Frost, Kilian Jornet, Luis Alberto Hernando, nuria Picas, Emelie Forsberg, Sage Canaday, Sebastien Chaigneau, Ian Sharman, Krissy Moehl, Ryan Sandes, Bruno Brunod, Marco Olmo,  Miguel Heras o Mónica Aguilera son sólo algunos de los nombres que han forjado la historia de Transvulcania.




Quien no ha participado todavía en Transvulcania la tiene marcada en rojo en su lista de carreras pendientes. Quien ya ha vivido la salida del Faro de Fuencaliente y ha cruzado la meta de Los Llanos de Aridane, seguro que quiere repetir la experiencia.


En este video se repasan los diez años de Transvulcania: